Telescópica, una obra reciclada en Boedo.

Obra de arte de Bustos y Galay a base de elementos reciclados que se expone en Boedo no podes dejar de visitar. Un nuevo concepto de arte que gana terreno. Se trata de una propuesta novedosa de los artistas Javier Bustos y Julián Galay que propone una nueva forma de vivir el arte. La obra fue realizada con elementos reciclados y otros objetos de poco valor. Se trata de una especie de nave, realizado de manera novedosa que se expone en el barrio de Boedo. La muestra se denomina Bonus Track y pretende erradicar el viejo concepto de arte estático que teníamos los porteños. El espacio hecho a medida, la renovación de materiales en desuso son algunos de los conceptos que pretende difundir esta nueva forma de crear. La idea empezó en el barrio de San Telmo hace 10 años aunque el concepto se remonta a la legendaria Age Of Communication del bajo porteño. No se trata de una exposición común sino que permite a los visitantes a recorrer el interior del espacio, mientras interactúan con otros visitantes. Mientras el público visita los recovecos del lugar, le ofrecen una degustación y música acorde. El espectáculo sale de lo común para brindar una propuesta diferente y atrayente. Telescópica es una fusión de música y exposición .La estructura, apoyada sobre una mesa, en el esquinero de una habitación en forma de L (un hallazgo que permitió desdoblar la acústica, así como entregar dos perspectivas de una obra basada en el contrapunto), consta de una pirámide de caños de PVC, con micrófonos en la base y gadgets preparados para manipular sonidos y batir láminas de diverso material (trozos de cinta métrica, papeletas, papel film), abrochadas por sensores en la cúspide. De los extremos de esta especie de nave desguazada, en la proa y en la popa, pendían dos tablillas de madera enhebradas por una cuerda de bajo, como mástiles de un lutier renacentista. Al frente, dos carcasas que alguna vez fueron cargadores de joystick sostenían un par de antenas de televisor. Sólo faltaba la presencia de los dos Frankenstein, que abordaron la criatura de chatarra muñidos de micrófonos y arcos de violín. En Telescópica hay cuestiones especiales que refuerzan el aspecto visual. La puesta en escena incluye coreográficas que acompañan el ritmo de la presentación. Cuencos metálicos que resuenan de manera particular, motores que se ponen en marcha, en un juego que pretende despertar los estímulos de los visitantes instigándolos a reconectarse con otra forma de hacer arte. Una experiencia única que genera un buen recibimiento en los visitantes y que no podes dejar de visitar. Una invitación abierta para que tus sentidos sean despertados a través de las técnicas que propone esta nueva forma modalidad artística.