La tecnología pareciera ser que es lo único que avanza en los últimos tiempos...Sus aportes a la comunicación en la vida diaria son variados, en algunos casos, accesibles y de gran importancia sobre todo, cuando uno pasa muchas horas fuera de la casa, cuando se tienen obligaciones familiares, laborales, etc...
Concretamente el teléfono móvil, el denominado smartphone, a través de las diferentes promociones que generan las empresas de acuerdo a las necesidades de la actualidad, ocupa un lugar casi fundamental en la vida de los ciudadanos de nuestro país y de otras capitales del mundo, también.
En los Estados Unidos se denomina "phubbing" al acto de colocar el dispositivo conectado a internet en tanto se conversa con otra persona. El término surge de la unión de las palabras phone, teléfono y snubbing, menospreciar.
Lo cierto es que la tecnología con su inmediatez y capacidad de penetración sin fronteras, tiene su efecto negativo que es la pérdida explicita de toda forma de respeto y cortesía con relación al prójimo.
De acuerdo con un relevamiento realizado por el Centro de Investigaciones Sociales y la Fundación UADE, sobre mil personas mayores de dieciseis años, el 37 por ciento manifestó que baja la mirada y utiliza el celular mientras comparte un café ó una comida. Profesionales dedicados al análisis de estos nuevos comportamientos, califican a esta actitiud de "síndrome de la cabeza gacha".
Sólo uno de cada diez encuestados, señaló que deja sonar el teléfono ó lo atiende a través de la función en marcha.
Un cuarto de los entrevistados confirmó que envía mensajes mientras está cruzando la calle...Uno de cada diez, lo hace cuando maneja el automóvil, sin medir en lo más mínimo el riesgo que entraña para ellos mismos ni para terceros.
El mal uso de la tecnología genera destrato, falta de respeto y al mismo tiempo suma la posibilidad cierta de accidentes, en algunos casos, fatales, que sin duda, podrían ser evitados.
