Aumenta los casos de niños cada vez más pequeños al psicólogo
El rol preocupante de las familias. Niños de 3 a 9 años incorporan en su temprana agenda asistencia al psicólogo. Tipologías de una nueva generación adicta a las terapias.
Una nueva generación de niños nacidos en una era informática. No superan los 9 años y ya son derivados por sus docentes al psicólogo por déficit en la atención, mala conducta o hiperactividad.
Encontrarse con una derivación semejante puede asustar primeramente a los padres. Sin embargo los expertos aconsejan tomarlo con calma debido a que sólo se trata de una nueva tendencia educacional que suma la rama de la psicología a la vida escolar.
Los problemas más comunes suelen deberse a la llegada de un nuevo hermanito como integrante de la familia, la efervescencia que provoca el inicio del jardín con sus pares o la simple inadaptabilidad escolar que en muchas ocasione provoca stress.
Las terapias infantiles comienzan generalmente a los 3 años pudiendo extenderse hasta los 6 años de edad.
Según los psicólogos, el choque generacional que se produce entre niños en una era cibernética con padres de 40 años de edad, cuya generación es drásticamente diferente genera unan especie de incomprensión e inadaptabilidad mutua. Sin embargo los que más sufren en éste choque generacional son los niños.
Los expertos consideran que los niños de hoy no vienen en condiciones peores o mejores a la de años anteriores pero si son quienes sufren más este cambio que los involucra.
La infancia se ve afectada por una serie de modificaciones socioculturales que avanza a pasos agigantados.
Los juguetes ya no son los mismos que años anteriores. Es común ver niños de 2 años en adelante con tablet y de 7 años de edad con una amplia participación en las redes sociales.
Estas nuevas formas de comunicación influyen socialmente en los niños cuyos juegos, lenguajes y formas de aprender se modifican.
Anexada a las nuevas costumbres los niños presentan síntomas de rebeldía y una falta de identificación social con los patrones de autoridad (padres/docentes).
Los niños de hoy cuestionan, exigen, están más receptivos y atentos a las propuestas de los mayores. Por eso la responsabilidad es abarcativa, comienza en la casa, sigue en la escuela y finaliza en la sociedad.
Los docentes deben estar atentos a no diagnosticar aceleradamente. Deben tener en cuenta el contexto familiar, las vivencias cotidianas del niño y estar abiertos al diálogo y la escucha.
Otras de las patologías manifiesta en niños menores de 6 años suelen deberse a trastornos de sueños o alimenticios. En este caso, son los padres quienes deben estar atentos a los llamados de atención.
Lo importante es no caer en la desesperación y entender que se trata de un proceso de acompañamiento conjunto para lograr la adaptabilidad del niño y un excelente desempeño escolar.
www.boedoweb.com.ar
Producción Propia