La liberación de G.P., el hombre que provocó un incendio en la parrilla "El Salteño", está generando alarma en el barrio porteño de Almagro. El agresor, familiar del dueño del local afectado, fue encontrado con botellas de alcohol y fósforos antes del siniestro, lo que ha despertado temores sobre su seguridad en la comunidad.
La Policía de la Ciudad liberó recientemente a G.P., el individuo acusado de iniciar un incendio en la parrilla "El Salteño", ubicada en el barrio de Almagro. El incendio se produjo alrededor de las 18 del domingo pasado, afectando tanto el local en la planta baja como el primer piso del edificio. La intervención de tres dotaciones de bomberos y tres ambulancias del SAME permitió controlar el fuego en aproximadamente 40 minutos. Afortunadamente, no se reportaron heridos.
Los bomberos indicaron que el siniestro podría haber sido causado intencionalmente. En consecuencia, G.P. fue detenido poco después del incidente cuando fue hallado en la calle Sarmiento al 4242, portando un bolso con botellas de alcohol vacías, una caja de fósforos y herramientas. Este hombre, de 30 años, es sobrino del propietario del local incendiado y reside en el edificio contiguo.
Tras ser detenido, G.P. fue trasladado al Hospital Alvear por orden del juez para ser evaluado. A pesar de su condición de "demorado", en la mañana del miércoles siguiente, vecinos del barrio vieron a G.P. merodeando por la zona, lo que generó una gran preocupación.
Estela, esposa del dueño de "El Salteño" y tía política de G.P., expresó su indignación y angustia por la liberación del agresor. "No puedo entender cómo la fiscalía no nos avisó que lo soltaron, sea cual sea el motivo", comentó. Estela y su familia se encontraban esperando en la vereda del local, expuestos al frío, esperando recibir la autorización para ingresar.
"Estoy muy angustiada. El chico está libre. Ahora estoy esperando que me prenda fuego mi casa o me dé un tiro en la cabeza si total en dos días sale libre", afirmó con preocupación. La mujer también se mostró alarmada por la posibilidad de que G.P. represente un peligro para la comunidad, ya que "pudo haber matado a todo el barrio".
Además, Estela reveló que vecinos filmaron a G.P. en el barrio, lo que intensificó la preocupación por la seguridad de los residentes. En cuanto al estado mental del sospechoso, Estela cuestionó su comportamiento, diciendo: "Se hace el loco. Cómo pudo armar una logística de vestirse de obrero para ingresar a la construcción y hacer todo lo que hizo".
Por su parte, Estela se mostró preocupada por sus dos hermanos que están bajo su cuidado, temiendo que el sospechoso pueda hacerles daño. Asimismo, detalló que, tras el fallecimiento del padre del agresor, el comercio pasó a estar bajo la gestión del hermano de su esposo, cuñado de Estela. "Él piensa que al quemar el local puede cobrar un seguro, pero el local es alquilado", explicó Estela.