Un total de 200 baldosas honorables están en la Ciudad. Destacan el compromiso social de cada uno de los memorables ciudadanos que pusieron empeño en contribuir a la comuna.
No hay un barrio en la Ciudad de Buenos Aires que no lleve alguna condecoración a personalidades destacadas del mismo.
Diferentes instituciones u ONG, dedicadas al reconocimiento de los hechos lograron instalar una memoria barrial en las baldosas conmemorativa de la Ciudad.
La iniciativa fue muy bien recibida por los vecinos y diferentes agrupaciones sociales.
Almagro y Flores por ejemplo, son dos de los barrios que exponen sus baldosas en honor a los desaparecidos durante la última dictadura militar.
En Recoleta, se homenajea de la misma manera al productor teatral Pepe Cibrián.
Personalidades que supieron destacarse con carisma, compromiso social y brindaron un gran aporte a los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires son los recordados y perpetuados a través de las baldosas conmemorativas.
En 5 años se logró que la comuna porteña brinde un sencillo homenaje a artistas, sacerdotes, bomberos y víctimas de diferentes tipos de tragedias e injusticias. Por ejemplo sobre la calle Pasteur, en el barrio porteño de Balvanera al pie de los arboles de la zona yacen los homenajes a los fallecidos en el atentado a la AMIA en los años 90.
Además del valor simbólico que representan, le ofrecen a la Ciudad un valor arquitectónico.
Los impulsores de éste iniciativa sostienen que homenajear a los héroes de la Ciudad a través de las baldosas y placas conlleva varias ventajas .Por un lado se hace referencia a la persona de manera heroica y por otro lado vuelve obligatorio al caminante voltear a ver el homenaje. Poner de frente a peatón con la realidad de un nombre indica una clara referencia a una historia que debe conocer.
Los turistas también preguntan respecto a los nombres gravados, quienes son quienes fueron, que hicieron y porque se destacaron.
Resulta un reconocimiento valido, económico y atrayente para todos.
La iniciativa nació en el seno de la organización "Barrios por la Memoria y Justicia" que decidieron esta forma de homenaje para los vecinos desaparecidos durante la última dictadura militar.
En 2006 se comenzaron a organizar para llenar los rincones porteños de memorables recuerdos con nombres de los héroes.
Almagro, Palermo, Balvanera, Pompeya, San Cristóbal ,San Telmo, La Boca ,Colegiales, Chacarita ,Montserrat, Recoleta, Núñez y Retiro fueron los primeros barios en sumarse a ésta forma de homenaje.
"En baldosas individuales y colectivas, logramos recordar a unos 1000 militantes populares en los lugares donde estudiaron, vivieron, trabajaron, fueron secuestrados o asesinados", explicó Marisa Munczek, de Barrios por la Memoria y la Justicia Almagro.
Con el apoyo del Gobierno porteño y la Legislatura de la Ciudad se logró realizar más avances en este aspecto.
El objetivo fue impulsar la cultura popular del reconocimiento al igual que el embellecimiento de las calles de la Ciudad.
Con el apoyo de los diferentes organismos y el programa "Baldosas que cantan" se intenta destacar particularmente a personalidades del mundo de la música que con su voz dieron entidad a Buenos Aires y la hicieron recorrer el mundo en sus voces.
Estas baldosas lucen sobre la avenida Callao con un total de 10 nombres que buscan perpetuar el arte porteño musical.
En los barrios Chacarita, Villa Ortúzar, Paternal, Palermo y Colegiales también se repite el fenómeno de las estrellas
